La Ermita de San Telmo vio finalizada en la jornada de este sábado su etapa de rehabilitación con el regreso de las figuras a su templo tras 3 años de exilio en el convento de San Francisco.
El tiempo acompañó y así, las calles de Jerez disfrutaron como si de un Viernes Santo se tratara de una jornada especialmente cofrade con el discurrir de la hermandad del Cristo de la Expiración.
La devoción que despierta esta hermandad, el fanatismo de los vecinos de su barrio y los aficionados cofrades acompañaron durante todo el recorrido a los tres pasos.